Version: v1.2

Portal Independiente de Información Financiera

Viernes, 6 de Junio de 2025

banner
JPM

Cotizaciones

Preocupación por la sostenibilidad fiscal en Estados Unidos

La renta variable ha rebotado hasta los niveles previos a abril, dado el resquicio de esperanza en el frente comercial, pero la «Gran y Hermosa» ley (‘Big Beautiful Bill Act’ en inglés) del presidente Trump representa un riesgo sustancial de cara al futuro.

Preocupación por la sostenibilidad fiscal en Estados Unidos

La renta variable se recupera Los resultados de mayo fueron dispares, dada la multitud de señales procedentes de Washington, muchas de las cuales pusieron de relieve la incoherencia de las recientes políticas estadounidenses. A principios de mayo, la conclusión de un acuerdo comercial entre EE.UU. y Reino Unido proporcionó cierto alivio al mercado, junto con la tregua comercial entre EE.UU. y China. Sin embargo, los mercados se centraron cada vez más en la sostenibilidad fiscal estadounidense durante la segunda mitad del mes. A falta de avances en las negociaciones comerciales con la UE, el presidente Trump amenazó con imponer un arancel del 50%, tras lo cual dio marcha atrás. En este contexto, la renta variable obtuvo buenos resultados, con Estados Unidos a la cabeza. Los bonos estadounidenses obtuvieron peores resultados, ya que el extremo más largo de la curva de rendimientos del Tesoro estadounidense experimentó un repunte de las primas de riesgo por plazo. Al igual que las materias primas, el oro se mantuvo prácticamente plano.

Perspectivas macroeconómicas - Todo sobre los aranceles

La economía estadounidense sigue resistiendo relativamente bien los retos planteados por la elevada incertidumbre política. Los índices de directores de compras repuntaron tanto en el sector manufacturero como en el de servicios, y el mercado laboral sigue resistiendo. Los precios al consumo subieron algo menos de lo previsto en un contexto de menor gasto. Las ventas al por menor de abril subieron sólo un 0,1%, frente al incremento del 1,4% de marzo, pero la confianza de los consumidores fue inesperadamente fuerte en mayo. Hasta ahora, poco se sabe sobre la medida en que se restablecerán los aranceles tras la pausa de 90 días para los aranceles «recíprocos» que expira el 9 de julio. En este difícil contexto, no esperamos que la Reserva Federal recorte su tipo de interés oficial antes de la reunión de septiembre.

La economía europea está en fase de recuperación, pero el ritmo sigue siendo muy gradual. Los índices de directores de compras han subido en mayo, aunque partiendo de niveles bajos. En Alemania, el clima empresarial del Ifo ha subido, a pesar de los anuncios de aranceles estadounidenses. Sin embargo, seguimos esperando que la economía alemana, orientada a la fabricación, se vea más afectada que la francesa o la italiana. El BCE está a punto de aplicar una nueva bajada de tipos en su reunión de junio, ya que la actividad sigue siendo relativamente débil. En Suiza, la fortaleza del franco suizo sigue siendo un reto para los exportadores suizos, ya que la divisa no ha cedido las ganancias registradas en abril. A pesar de las especulaciones en torno a un recorte de tipos de 50 pb, no esperamos que el BNS baje su tipo de interés oficial a territorio negativo en su reunión de junio, dada la gran incertidumbre política y macroeconómica. En Reino Unido, las cifras de inflación de abril alcanzaron su nivel más alto en más de un año, lo que arroja dudas sobre el ritmo de recortes trimestrales de los tipos por parte del BoE. Por otro lado, los elevados niveles de rentabilidad de los bonos británicos a largo plazo aumentan las probabilidades de que se produzcan más recortes del gasto público.

Las políticas arancelarias estadounidenses han añadido más incertidumbre a las perspectivas de crecimiento de Japón, dificultando que el Banco de Japón (BoJ) continúe su senda de endurecimiento monetario este año. Además, Japón ha adoptado una postura dura en sus negociaciones comerciales con EE.UU., buscando la eliminación total de todos los nuevos aranceles. Con las elecciones japonesas a la vuelta de la esquina, es poco probable que se alcance un acuerdo comercial antes de finales de julio. La tregua comercial entre EE.UU. y China, con una pausa de 90 días de los aranceles que superan el arancel general del 10% y el arancel del 20% relacionado con el tráfico de fentanilo, proporciona cierto alivio a las perspectivas de crecimiento de China. Aun así, los últimos datos muestran que la actividad económica se ha ralentizado y el mercado laboral sigue débil. De ahí que se haya vuelto más incierto si el objetivo de crecimiento del 5% fijado por China para 2025 podrá aún alcanzarse.

Ampliar Noticia

banner