Version: v1.2

Portal Independiente de Información Financiera

Viernes, 1 de Agosto de 2025

banner
JPM

Cotizaciones

La Fed no toca los tipos, pero deja abierta la puerta a un recorte en otoño: primeras reacciones de las gestoras internacionales

La Reserva Federal optó por mantener sin cambios los tipos de interés, en línea con lo que descontaban los mercados. La novedad no estuvo en la decisión, sino en los matices del comunicado y en el equilibrio que Jerome Powell buscó durante la rueda de prensa: ni señales claras de inminente recorte ni negación de esa posibilidad.

La Fed no toca los tipos, pero deja abierta la puerta a un recorte en otoño: primeras reacciones de las gestoras internacionales

Sin embargo, Ray Sharma-Ong, director de soluciones de inversión multiactivos para el Sudeste Asiático en Aberdeen Investments, interpreta que la puerta a un recorte en septiembre sigue abierta, siempre que los datos de empleo e inflación acompañen y que el simposio de Jackson Hole no aporte nuevas sorpresas. Advierte además que "la crítica de Trump y su intención de sustituir a Powell aumentan la incertidumbre y elevan las primas a plazo".

Desde TwentyFour AM (Vontobel), el gestor de fondos Gordon Shannon destaca la revisión de crecimiento de "sólido" a "moderado" y el reconocimiento de una incertidumbre "aún elevada" como pistas de un enfoque de esperar y observar. Una visión compartida por Robert Lind, economista de Capital Group, que señala el equilibrio entre crecimiento débil e inflación persistente, y anticipa una relajación moderada si la inflación se contiene. Ashish Shah, director de inversiones de renta fija en Goldman Sachs AM, coincide en que, si los datos lo permiten, "la Fed podría reanudar su ciclo de flexibilización en otoño".

El empleo y la inflación, claves para la hoja de ruta
Por su parte, Erik Winograd, economista jefe de EE. UU. en AllianceBernstein, también cree que el FOMC sigue en modo observación. Estima recortes de hasta 75 puntos básicos en el segundo semestre, siempre que el mercado laboral se debilite. Resalta que Powell prioriza ahora la tasa de desempleo como referencia principal, al considerar que las cifras de nóminas están distorsionadas por la inmigración. Subraya que la Fed quiere evitar repetir el error de confiar en una inflación transitoria. En esta línea, Vincent Reinhart, economista jefe de BNY Investments, refuerza la percepción de pausa estratégica. En su opinión, el mensaje de fondo es que las condiciones para recortar aún no se han alineado y a diferencia de otros expertos, su escenario base apunta a un recorte en diciembre, cuando los datos validen una menor presión inflacionaria y un empleo más frágil.

El análisis de Max Stainton, Estratega Sénior de Macroeconomía Global en Fidelity, refuerza esta visión: Powell dejó claro que un recorte en septiembre no es inminente y que las condiciones financieras actuales son "bastante fáciles". Para Stainton, la Fed se enfrentará a más presión política tras las disidencias de Bowman y Waller —ambos aspirantes a presidir el banco central—, pero Powell se mantiene firme en un enfoque prudente ante los riesgos de estanflación. Su previsión central también sitúa el primer recorte en diciembre.

Equilibrio institucional ante la presión política
La presión del expresidente Trump para que se aceleren los recortes fue ignorada por Powell, quien mantuvo un tono institucional. Shannon destaca que "evitar confrontaciones políticas y mantener la unidad del Comité fue clave en su mensaje".

La decisión no fue unánime: Michelle Bowman y Christopher Waller votaron a favor de un recorte inmediato. Desde Goldman Sachs AM interpretan esta división como parte del debate interno y cree que el banco central podría actuar en otoño si los datos lo permiten.

El contexto político añade un componente de incertidumbre. Sharma-Ong considera que los mensajes desde la Casa Blanca generan presión sobre la independencia de la Fed y podrían alterar la dinámica de expectativas. Aunque el mercado aún confía en la autonomía del banco central, el ruido político ya comienza a reflejarse en los activos de duración más larga.

Mercados: sin señales claras
Para Richard Clarida, vicepresidente global de PIMCO, el tono de Powell fue más firme de lo esperado: "el mercado esperaba una pista clara sobre septiembre, pero recibió un mensaje condicionado a los datos". Como resultado, la probabilidad de recorte en septiembre pasó del 70% al 40%, según Sharma-Ong.

Ambos coinciden en que los próximos informes de empleo e inflación y el simposio de Jackson Hole serán determinantes. En palabras de Winograd, "la Fed está bien posicionada para responder a los datos, pero no tiene urgencia por actuar". Clarida añade que la hipótesis base de PIMCO es que la Fed comience a recortar en el segundo semestre, si la actividad se modera.

Lind advierte que "el impacto total de los acuerdos comerciales aún no se ha materializado", lo que podría ralentizar el crecimiento. También anticipa movimientos moderados de política monetaria en Europa y una senda restrictiva en Japón. La combinación de menor crecimiento global y normalización monetaria desigual genera oportunidades selectivas en los mercados de crédito.

Posicionamiento de mercado e implicaciones para el dólar
En renta fija, Álvaro Peró, director de inversión de renta fija de Capital Group, considera que "un entorno de política monetaria favorable favorece el crédito de mayor calidad". Añade que la liquidez y el apoyo técnico siguen comprimiendo los diferenciales. Señala oportunidades en bancos europeos, eléctricas de EE. UU. y farmacéuticas. También identifica valor en ciertos segmentos de deuda emergente con fundamentos sólidos y baja correlación con los riesgos globales.

Por su parte, John Lamb, director de inversión en renta variable de Capital Group, subraya la importancia de carteras flexibles y diversificadas. "La resiliencia y la adaptabilidad son clave en un mercado volátil", afirma. Las compañías globales con flujos diversificados y cadenas logísticas sólidas están mejor posicionadas.

Sharma-Ong prevé que el dólar mantenga su fortaleza por varios factores: posible repunte inflacionario, divergencia con otros bancos centrales y mayor claridad sobre aranceles. También destaca el apoyo estructural que podrían aportar las leyes GENI‑US y CLARITY, si avanzan en el Congreso, consolidando la demanda por activos en dólares. La vinculación entre estos instrumentos y la deuda pública estadounidense podría reforzar la condición del dólar como activo refugio estructural en un entorno global incierto.

banner